¡Por fin llega el día! Llevamos seis meses esperando este viaje con muchísimas ganas, estoy seguro que será uno de los más especiales de nuestra vida, los 3 de aventuras por Japón… Esto promete, chavales…
Salimos el día 18 a mediodía con Air China, un vuelo con escala en Pekín que nos toma entre 17 y 18 horas, contando con las 3 horas de escala en Pekín. Decir que ha sido imposible hacer el check in online, porque la página fallaba todo el rato. Llamé al numero de asistencia y me dijeron que tengo que arreglarlo en el aeropuerto, porque al comprar el billete no consignaron los pasaportes. En fin, espero no tener problemas de asientos!
En el aeropuerto nos ponen juntos en los dos vuelos, ¡que bien! El primer vuelo volamos con un 787 bastante nuevo, y el segundo con un Airbus 330. En principio el 787 debería ser más cómodo y silencioso, pero solo cumple en el apartado silencioso, porque los asientos son más estrechos y mis vecinos son incomodísimos. La escala en Pekin es fácil, no hace falta recoger la maleta hasta Tokio y solo hay que pasar un pequeño control de pasaportes y seguridad, donde los chinos son bastante cortantes, la verdad. Solo son un par de horas que no hay mucho que hacer a las horas de aquí (creo que son como las 6 de la mañana, no hay nadie en la terminal).
Tras llegar a Narita, y pasar el control de inmigración (pequeño fallo, para evitar tener que hacerlo en el aeropuerto en la cola de inmigración rellené el formulario de visit japan web, y pensando que solo hacía falta para adultos, solo lo hice para mi, y resulta que hace falta para todos, así que nada, a hacer la cola y rellenar los papeles, eso si, me da la sensación de que en rellenar los papeles se tarda menos que lo que tardé en rellenar el formulario de la web)… bueno, eso, que una vez que recuperamos nuestra maleta facturada hay que ir a la ciudad que está bastante lejos, tomamos el tren Tokio Skyliner, uno de los dos trenes exprés que llegan a la capital, es el que nos deja más cerca de nuestro hotel y está bien de precio, tarda unos 50 minutos. Existen varias alternativas, Narita express es otro tren rápido pero era más caro, lento y nos venía peor. También se puede tomar autobús, o metro, pero se nos iba hora y media al menos, o bien coger taxi, pero los taxis aqui pueden cobrarte entre 20000 y 30000 yenes en llevarte al centro, asi que mejor evitarlos si podemos. El tren, para los que pudimos mantener el ojo abierto, nos deja ver unos paisajes preciosos de las afueras de Tokio, así como las casas bajas de los suburbios, muy bonito la verdad.
Nos bajamos del tren en la estación de Ueno y vamos caminando unos 10′, guiados por el Maps hacia Akihabara, a nuestro hotel, el Akihabara Nakagawa Inn un hotel de 3* muy coqueto y cómodo a 5’ del barrio Akihabara. Es un hotel que nos ofrece un tatami y unos colchones para dormir, parece muy cómodo y una experiencia japonesa, pero lo malo es que no tiene ventanas jajajaja…

Llegamos molidos del viaje sin apenas pegar ojo, pero aún así, tras refrescarnos un poco del viaje y de la bofetada de calor que nos ha dado del metro al hotel cargados, no podemos reprimirnos de dar una vuelta, al fin y al cabo no es muy tarde y nos da tiempo a explorar, así hacemos tiempo y mejor dormimos a la noche.
Como lo tenemos al lado, vamos al barrio de Akihabara a ver unas cuantas tiendas, que aqui hay de todo tipo, y arcades, pachinkos… Este barrio tiene mucha vida. Las tiendas son enormes, no por planta, sino por altura, porque todas aquí es a lo alto, las tiendas por modestas que sean son de múltiples plantas. Visitamos un par de tiendas buscando juegos retro pero no encuentro lo que busco, quería encontrar material para mi ordenador MSX y ¿por que no? un MSX que esté bien de precio. Entramos en un par de tiendas, no sin dificultad para orientarnos, porque aquí la numeración de las calles no la pillo de momento, pero bueno, Super potato (una tienda en la 5º y 6º planta de un bloque de 10 alturas) y Mandarake (pero aqui solo encontramos mangas o DVD’s).

Seguimos visitando tiendas, viendo muñecos anime y finalmente buscamos unos arcades en los que echar unas monedas en las tragaperras de gancho y en las máquinas recreativas. Cada partida 100, 200 o 300 yenes se van… y ves arcades de 7 u 8 plantas, cada planta con su temática. Espectaculares las plantas de máquinas de música, con los chavales jugando a juegos de baile, de guitarra, y de ritmos, con toda la música mezclada a tope que sales de ahi tarumba.
Y nada, tras muchas vueltas nos volvemos para el hotel que ya el reloj me marca 10000 pasos a lo tonto. A la vuelta entramos en un sitio de ramen en el que comimos unos dumplings y un ramen riquísimos. El sitio se llama The Golden Ramen y bueno, al principo nos costó pero el dueño / cocinero, por señas, nos vio perdidos y nos dijo que había que sacar unos tickets en una máquina expendedora, que nos dio unos tickets y ya se los dimos a el y nos trajo la comida a la mesa. Creo que acertamos con el sitio porque entraban trabajadores a la vuelta del curro a comer, eso es buena señal.
Y nada, nos vamos a dormir antes de las 21. Estamos muertísimos. Demasiado hemos aguantado con tanto viaje.
